Te encontré…
y gastaré papeles entintados.
Se aplastaran mis signos
por tratar de comprenderte.
Retorciéndose, intentarán explicar
lo inexplicable.
Placenteramente se exaltarán
como ese conocido deseo insatisfecho.
La bronca por tu silencio,
los deformara en un caos azul,
¡Si pudieran mi signos descifrarte!,
ya nos hubiéramos fundido…